El episodio 10 de TenLuces, el espacio radiofónico de Philips Automotive Lighting en colaboración con Capital Radio, aborda un tema clave: cómo la iluminación del vehículo influye directamente en la seguridad vial. En esta ocasión, Ana Martín (responsable de marketing de Lumileds) y el Juan Luis de Miguel (Director de Investigación, Centro Zaragoza) reflexionan sobre la importancia de ver y ser vistos en carretera, especialmente en un parque automovilístico envejecido como el español.
Iluminación deficiente = mayor riesgo
Uno de los datos más llamativos compartidos en el programa es que cerca del 50% de los accidentes por salida de vía ocurren en carreteras sin iluminación o en condiciones meteorológicas adversas. Esto demuestra que una correcta iluminación podría evitar muchos siniestros, sobre todo en trayectos nocturnos o de baja visibilidad.
Además, según los datos de la ITV, los fallos de alumbrado están entre las principales causas de rechazo. Esto refleja la realidad: nuestro parque móvil está envejecido, con vehículos de más de 15 años que muchas veces no reciben el mantenimiento necesario.
Más edad, menos inversión en mantenimiento
Tal como señala Juan Luis de Miguel, a medida que el coche envejece, también se reduce el dinero invertido en su mantenimiento. Este comportamiento resulta peligroso, ya que los vehículos más antiguos requieren mayor atención técnica. Y no solo hablamos de motor o neumáticos: los sistemas de iluminación también sufren desgaste.
En este contexto, los expertos apelan a la responsabilidad del conductor: revisar el estado de las luces debería ser un gesto habitual, como mirar los niveles o la presión de los neumáticos.
Qué puede hacer el conductor: revisa, limpia, sustituye
¿Qué puedes hacer tú para mejorar la iluminación y seguridad vial?
- Revisión periódica: comprueba que todas las luces (cortas, largas, intermitentes, freno, marcha atrás, antiniebla) funcionan correctamente.
- Limpieza de faros: la suciedad acumulada o el efecto de los rayos UV puede reducir la eficacia lumínica. Un trapo puede marcar la diferencia.
- Restauración o sustitución de ópticas: si los faros están amarillentos o translúcidos, existen tratamientos de pulido muy efectivos o se pueden sustituir por completo.
- Cambio por pares: si una lámpara se funde, lo ideal es cambiar las dos para evitar diferencias de intensidad que afecten a la visibilidad.
- Consulta con tu taller: no todas las lámparas sirven para todos los conductores. Un profesional puede ayudarte a elegir la lámpara homologada más adecuada para tus trayectos habituales.
Tecnología al servicio de la seguridad
En los últimos años, los sistemas de alumbrado han evolucionado notablemente. Desde los faros halógenos hasta los LED matriciales, la mejora en alcance, anchura y calidad de iluminación ha sido impresionante.
Pero no basta con tener buena tecnología si no se cuida y mantiene. De nada sirve que tu coche haya salido de fábrica con luces potentes si los faros están sucios, opacos o las lámparas desgastadas.
Más visibilidad, más tranquilidad
Tanto Ana Martín como Juan Luis de Miguel coinciden en una idea clave: la seguridad empieza por uno mismo. La iluminación del vehículo no solo afecta a lo que tú ves, sino también a cómo te ven los demás. Y en la carretera, ver y ser visto salva vidas.
En definitiva, si conduces un vehículo —y especialmente si es de más de 10 años— revísalo con frecuencia, cuida la iluminación y déjate asesorar por profesionales.
La luz que salva
La iluminación no es un detalle menor. Es un elemento fundamental para evitar accidentes. Y lo mejor: está en tus manos mejorarla con acciones simples, económicas y efectivas.
Ten luces. Aumenta tu seguridad. Visita tu taller de confianza y asegúrate de que ves y te ven con claridad.
